En los meses anteriores he sufrido
desafecciones importantes con gente muy cercana. Amigos y familiares
con los que creía mantener una relación profunda y no han
correspondido mis expectativas llegado el caso.
La primera vez que me pasó, fue con mi
grupo de amigos habituales. Pensaba que su comportamiento distante y
a veces agresivo se debía a malas rachas o momentos que habían
vivido durante mi estancia en el extranjero. Supuse que en unas
semanas de vacaciones, fiesta, y quedadas en el parque se calmarían
y todo volvería a la normalidad. Quise ir en plan héroe y me salió
mal la jugada: me di cuenta que no eran comportamientos causados por
tensiones o estrés puntuales; simplemente habían cambiado. Ahora
eran así.
Unos meses después, antes de las
navidades, mi mejor amigo se enfadó conmigo por lo que creo fue una
tontería. Pensé que el cabreo le duraría una semana o dos a lo
sumo, y decidí no tocar el tema, dejar que se enfriará. Al ver que
con el paso de los días, seguía ignorándome comencé a mandarle
mensajes, no solo para hablar de lo ocurrido si le apetecía, sino
también para volver a salir como si nada hubiera pasado. Ni caso. A
día de hoy me doy cuenta que he perdido una amistad de años, y muy
importante para mí, por lo ocurrido aquella tarde. Quiero pensar que
hay algo detrás, no puedo aceptar que solo por eso me haya apartado
de su lado.
En navidad vinieron mis padres a casa y
pude hablar con ellos este tipo de cosas. Como dije arriba, no solo
he tenido problemas con amigos, sino también con algún familiar
(excluyendo a mis padres). Como no podía entender como un amigo o un
familiar se podían comportar conmigo así, yo que les apreciaba
tanto, asumí que eran una especie de traidores. Habían traicionado
nuestra amistad; nuestra relación.
Más tarde asumí que no había traidor
ninguno. Porque lo único que han violado han sido mis expectativas
sobre la amistad, sobre como debe ser una relación de pareja, sobre
la relación entre hermanos, etc. Cada uno tiene su manera de ver las
cosas, y como yo defina una relación no tiene que significar lo
mismo para otra persona.
Que consideré a alguien mi amigo, no
significa que ese alguien se consideré a sí mismo mi amigo. Incluso
considerándose mi amigo, puede no entender la amistad como yo la
entiendo. Por tanto es muy posible que "traicione" o
incumpla mis expectativas.
Las relaciones humanas son tan simples,
que acaban por parecer complejas.
He sentido dolor estos meses debido a
mi manera de ver las relaciones, pensando inconscientemente que para
todos significaba lo mismo. Como muchos, busco seguridad en mi día a
día, incluyendo mis relaciones con los demás. Me asusta lo
inesperado, así que una vez que siento algo por otra persona,
persigo la manera que ellas tienen de verme, y con declaraciones como
"te quiero", "somos amigos", o "eres mi
hermano", ya servía para sentirme
seguro de que las cosas irían bien. Irían según lo previsto.
Finalmente se han "torcido", no han seguido el guión
porque resulta que cada personaje tiene uno diferente, y me he
sentido traicionado y frustrado.
Las relaciones son parte del misterio
de la vida, imagino. Si decido comprometerte con alguien he de saber
que esa relación no será muchas veces como espero. Que traerá
cambios y cosas imprevistas. Tanto buenas como malas. Les estoy
agradecido a aquellos que me han causado dolor estos meses, ahora veo
que no ha sido con mala intención y además he acabado por aprender
algo de esta obra teatral que es la vida.
Desde aquí quiero felicitar el
cumpleaños a una de esas personas con las que he tenido un
"encontronazo" recientemente. Le deseo la mejor de las
suertes y valor en para realizar sus proyectos.
Me gusta que al final hayas sacado algo positivo: el aprendizaje.
ResponderEliminarTodos alguna vez nos hemos sentido decepcionados por amigos o familiares.
Creo que lo que hay que hacer es decidir que estamos dispuestos a dar y que queremos recibir a cambio. Se que no son matematicas, y que lo he resumido de manera muy simple. Pero ni tienes porque conformarte con que te traten mal y nunca te den lo que esperas ni tampoco tu dar demasiado y tener el listo demasiado alto.
Yo antes enseguida rompia una amistad si me decepcionaba, hasta que vi que me entregaba tanto a ellas que esperar lo mismo era imposible.
He conseguido regular mi entrega y entender que a veces mis amigos no me dan lo mismo que yo pero me dan otras cosas que me benefician.
En fin no digo que sea tu caso, pero seguro que encontraras tu equilibrio.
También piensa que si no recuerdo mal tu edad estáis en una época de cambios, de asentarse, definirse y madurar. Y a veces los amigos no van por el mismo camino de la vida que nosotros y ya nuestra manera de ver la vida no coinciden.
Besos
Bienvenida de nuevo Celia!!ya te echaba de menor :) estoy de acuerdo contigo al 100%, ahora me planteo mejor mis relaciones con los demás, dando cierta flexibilidad por supuesto. A veces me he dado cuenta que no tengo por que romper una relación, simplemente tomarmlo como una relación más superficial. Petons!!
ResponderEliminarUmmm... tu correo no aparece en tu perfil verdad?...
ResponderEliminarCierto, me lo aconsejas?
EliminarBueno, nunca se sabe quien se puede dirigir a ti yo he conocido gente fabulosa gracias a el.
ResponderEliminarAunque en este caso solo era para avisarte de que te había dedicado una entrada en mi blog. Y para que tengas mi dirección por si algún día quieres romper un rato el silencio.