Nunca he explicado aquí una de mis
grandes peculiaridades: soy vegetariano.
Como podréis imaginar, soy una especie
minoritaria, y por ello, es sacar el tema (normalmente no soy yo,
sino algún amigo que me delata) y empezar a recibir preguntas en
forma de misiles y puñales. No os asustéis, también hay preguntas
de simple curiosidad, no todas son para atacar mi postura o excusar
la propia.
Siempre contesto que las razones para
ser vegetariano son mayores que las razones para no serlo. Pero
sobretodo entiendo, es una cosa muy personal. Nunca trato de
convencer a nadie de que se mude a "mi barrio", aunque sí
defiendo mi visión ante cualquiera. Como en otros temas, si la otra
persona no siente un mínimo de interés, por un oído le entra y por
otro le sale. Yo mismo tardé 3 años en interesarme, y finalmente,
decidirme.
Los motivos, como digo, son variados.
Desde el aspecto ético, pasando por la economía y el medioambiente,
hasta llegar a la salud:
-Economía:
Aunque el proceso de industrialización ha conseguido disminuir los
precios de la carne y derivados, todavía consumir productos
vegetales es más barato. No se trata de que los ganaderos sean más
avaros que los agricultores, sino de lógica bioenergética: mientras
en un campo de una hectárea se puede cultivar, por ejemplo arroz,
para alimentar a dos familias, la cantidad de carne para alimentar a
esas dos familias necesita de mayor superficie de pasto que una
hectárea. La energía que se transmite de un nivel trófico a otro
se pierde en forma de calor y energía consumida por el nivel
anterior. Es decir, bioenergeticamente hablando, consumir plancton es
más eficiente que comer sardinas, comer sardinas es más eficiente
que comer atún, y comer atún es más eficiente que comer tiburón.
Es más barato generar, y por tanto consumir, los productos de
niveles tróficos primarios que los productos de niveles tróficos
secundarios, terciarios... De esta forma, entendemos porque las
sociedades más pobres basan su dieta en productos vegetales,
mientras que las sociedades más ricas aumentaban sus platos
cárnicos. Actualmente, vivimos un momento de la historia donde
países anteriormente "pobres" están experimentando un
rápido crecimiento económico. Países como China, Brasil o India,
están aumentando su consumo de carne, lo que ha ocasionado que los
precios de productos básicos como el arroz, trigo o maíz, hayan
aumentado (por la demanda de alimento de su industria ganadera),
generando una grave crisis alimentaria (otro factor relacionado es el
auge de los biocombustibles, industria dependiente también de estos
productos).
-Medio-ambiente: el punto
anterior tiene que ver con este otro. Cuando consumimos productos de
niveles tróficos primarios, consumimos menos energía, es decir,
somos más eficientes. Esto favorece el ahorro energético, reduce la
cantidad de residuos producidos, y en consecuencia, nuestra huella
ecológica en el planeta disminuye. Cuando se habla del cambio
climático generado por la emisión excesiva de gases efecto
invernadero, muchos son los que piensan que este problema únicamente
deriva del tráfico y las fabricas, pero son las granjas ganaderas
industriales de cerdos y vacas las que mayor emisión de gases efecto
invernadero producen. Por no hablar del daño que ocasionan los
campos transgénicos de soja y maíz que sirven para alimentar a la
industria ganadera creciente, o la gran contaminación de suelos y
aguas que producen las factorías con heces y animales muertos.