Fuente: www.elle.es |
Bueno, ya he comprado los billetes para
Nairobi. Vuelo a allí el próximo sábado y me quedaré en la ciudad
por 10 días.
Reconozco que en principio andaba muy
entusiasmado con volver a Nairobi y pasar unos días con K, la chica
que conocí en mis vacaciones de navidad. Sin embargo con el paso de
los días reconozco que me está entrando cierto miedo debido a
nuestra falta de contacto recientemente y su actitud distante.
Resumiendo, K y yo nos conocimos en la
noche de latina de Nairobi (como no podía ser de otra forma conmigo
xD) bailando bachata y salsa. Me encantó desde el primer momento que
la vi entrar en la sala de baile, y de hecho fui yo quien tomó la
iniciativa pidiéndola bailar varias veces, y luego preguntándole a
mi compañero de viaje sino le importaba cambiarnos a la mesa donde
ella y su amiga estaban. Tras el baile latino, fuimos a una
discoteca, y aunque su amiga no paraba de “buscarme” con ciertos
bailes eróticos, y ella se fijaba en mi amigo (quien como buen
americano no paraba de “arrimar” por detrás), yo tenía claro
que ella era quien yo quería. Nos marchamos a los pocos días pero
mantuve el contacto y cuando regresé a Nairobi la pedí que me
hospedase por 4 días hasta fin de año, y fue genial. La chica me
encantó a pesar de algunas confusiones a nivel emocional que ella
estaba pasando. La noche de fin de año no fue muy buena porque de
nuevo mi amigo y ella bailaron, a mi entender, excesivamente
juntos... Pero en general he de decir que regresé a Somalia con
ganas de volver a verla. Y así me lo hizo entender ella también.
Una vez de vuelta en Somalia,
hablábamos casi todas las noches. Me hacía entender lo mucho que me
echaba de menos y me decidí a buscar trabajo allí. No lo he
encontrado todavía, pero voy a gastarme el salario de enero, febrero
y marzo para ir a verla 10 días a Nairobi. Creo que queda claro lo
que ella me importa. Sin embargo, en las últimas semanas casi no
habla conmigo (solíamos chatear por la noches) si comparo con enero.
Tuvimos dos pequeñas discusiones (una sobre la circuncisión que ya
escribí en el blog, y otra sobre su forma de bailar con mi amigo y
me encuentro con otra chica en Kenya durante las navidades), y no la
veo tan entusiasmada por mi viaje como esperaba. De decirme todos los
días “te echo de menos”, ha pasado a no hablar casi, y eso me
activa las experiencias negativas que tuve con otras chicas. Me dice
que ahora habla menos porque anda pasando un momento difícil (no la
gusta su trabajo y tiene problemas de dinero para pagarse los
estudios), pero quiere que vaya a verla, aunque no cree tenga mucho
tiempo para mí. No sé.
Ayer la dije claramente que me gustaría
me dijera si hay algún problema entre nosotros. No es la primera vez
que conozco a una chica, me dice al principio lo mucho que la gusto,
lo mucho que me echa de menos, etc etc Y cuando decido hacer un
esfuerzo por ella, a nivel económico o emocional, resulta que ha
perdido el interés por mí o simplemente ha conocido a alguien que
le gusta más sin haberme dicho nada. Me ha causado mucho dolor ese
tipo de situaciones hasta el punto de costarme confiar en nuevas
chicas que me gustan. Cada vez que una chica me expresa lo mucho que
la gusto, una luz se enciende en mi cabeza diciendo “no la creas,
te la van a pegar otra vez”.
Ayer se cabreó conmigo tras leer lo
que la dije. Me contestó que anda pasando por un mal momento y yo
solo pienso en mí. Que no la comprendo. Que desconfío de ella....
Me dijo también que una amiga suya se ha quedado sin casa y
posiblemente se quede en la suya durante esos 10 días que yo voy a
visitarla. Yo ya no sé que pensar. Me dice que no tendrá tiempo de
salir conmigo, pero en facebook veo fotos de fiesta con sus amig@s,
y un tío escribiéndola comentarios a cada rato.
No sé si hago bien en desconfiar,, o
si tal vez mi mente y experiencias anteriores me están jugando una
mala pasada a mí (y a ella). Me encantaría que esos 10 días fueran
la oportunidad para conocernos mejor y disfrutar del tiempo que no
tenemos juntos, pero confieso que me asusta la idea de haberme
gastado 2 sueldos en un vuelo donde todavía el suelo es resbaladizo.